Cuando no puedas dormir, cuando las lágrimas se caigan de tus ojos. Cuando no puedas sonreír, cuando no entiendas lo que sentís, llámame. Y aunque yo muchas veces tampoco estoy contenta, y aunque yo muchas veces tampoco entiendo lo que siento. Te quiero, y esa es una buena razón para seguir y esa es una buena razón para empezar de nuevo.
(Sigo esperando ese llamado, porque yo ya lo hice)
Hace 3 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario